15 años del primer bebé Eugin

El deseo de tener un hijo es uno de las cosas más fuertes (me atrevería a decir incluso que la que más) que he experimentado jamás. En mi caso, ese instinto siempre ha estado ahí, latente, esperando el momento preciso para intentar hacerlo realidad. Ya he comentado alguna vez que llegar hasta mi primer hijo no fue un camino fácil pues algunos años antes de plantearme seriamente ser madre me diagnosticaron una malformación severa de útero y trompas que, a priori, parecía poder complicar este sueño y en mi cabeza empezó a cobrar fuerza la idea de que, probablemente, nunca …

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