Un embarazo de riesgo (el de mi hijo) y tres abortos posteriores son las cargas de la mochila que porto en este nuevo embarazo. Una mochila que pesa como una losa y que, en muchas ocasiones, me hace ver las cosas de forma negativa y plagadas de ansiedad.
Estoy muy feliz, como no podía ser de otra forma, pero no irradio la felicidad y la luz que tienen la mayoría de las embarazadas y no me gusta demasiado hablar del tema. Hay ocasiones en las que no me gustaría sentirme como me siento pero por más que lo intento no puedo evitarlo. Hay días en los que el dolor abdominal me parte en dos o las contracciones se hacen constantes y molestas; y en esos momentos recuerdo que mi útero es diferente y, como me han dicho los médicos una y otra vez, con una respuesta impredecible. Cada día me levanto pensando si este será el último día, si mi cuerpo dirá “hasta aquí he llegado”, y el sueño se romperá de nuevo en mil pedazos.
Y cuando logro salvar esos miedos y acabar el día con cierta esperanza llega el pincahzo. Un pinchazo diario de heparina que debo ponerme en la tripa hasta pasado el post parto a causa de un trastorno de coagulación sanguíneo descubierto a raíz de los abortos. Un pinchazo que a veces duele físicamente, que me causa hematomas y un escozor intenso pero que, sobre todo, duele anímicamente al pensar que vivo enganchada a una medicina que hace que todo funcione. Y si un día la medicina no hace el efecto deseado todo se iría a pique, independientemente del momento de la gestación en el que me encontrara…
Cada mañana al despertar me miro en el espejo y trato de ser optimista y positiva. Me repito una y otra vez que las cosas saldrán bien, que no tienen porqué ir mal; pero hay días malos en los que la energía positiva brilla por su ausencia.
Sin embargo quiero quedarme con una imagen esperanzadora. La de mi pulguita creciendo fuerte y ajena a las locuras de su madre. Y es que cada semana cumplida es una batalla ganada y quiero creer que mi tesón y mi lucha por lograr mi sueño contra viento y marea tendrá, al fin, una recompensa.
Por supuesto que tendrás recompensa. Ya la tienes, de hecho, ver como crece y notarlo dentro de ti. Todo va bien y todo seguirá bien. Un beso 🙂
¡Seguro que sí! Que ganitas tengo de llegar a la meta. Gracias por vuestro apoyo!
Vamos Rubia lo estas haciendo fenomenal y va a salir genial, ¡¡ánimo guapetona!!, sois muy fuertes los dos y estáis demostrando ser unos campeones!!
Vamos pulguita ya te queda un poquito más de la mitad y habrás llegado a la meta
Cuando nazca pulguita me parecerá increíble todo lo que estoy viviendo ahora… Recordádmelo porfa cuando me entren ganas de tener un tercero! 😉
Gracias morena, eres lo más!
Es comprensible que te sientas así, ¿¿quién en tu situación estaría angustiada?? Pero estoy segura de que ese bebé te está mandando toda la fuerza que necesitas para afrontar este embarazo con mucha esperanza. No dejes de repetirte que va a ir bien.
Un abrazo grande.
Esa recompensa ha de llegar, claro que si. Imagino que no es fácil, como tu dices, superar esos miedos y preocupaciones que acechan, pero animo! Porque ese bebe dentro de ti percibe lo que tu sientes y cuanto mas alegre e ilusionada te sientas, seguro que el bebe también lo esta y ayuda a que todo vaya mejor. Y preocuparte no va a hacer que te encuentres mejor, mientras que estar optimista e ilusionarte si. Se que es mas facil decirlo que hacerlo, pero animo y aqui estamos para apoyarte y animarte en los momentos bajos. Un besazo y disfruta que lo mereceis los cuatro!!
Que difícil tiene que ser esa situación. Yo en tu lugar estaría cagada de miedo. Pero eres muy fuerte y lo superarás. Además, la recompensa de tener a tu lentejita entre los brazos hará que olvides todo lo demás.
Mucho ánimo!
Es duro leerte y más duro tiene que ser vivir así todos los días. Supongo que habrá días buenos y días malos, mejores y peores, pero el milagro de la vida es así y yo creo que hay que vivir con intensidad cada momento… siendo consciente de todo lo que puede pasar, pero sin dejar que eso nos paralice. Hace poco veía una foto en facebook de una mamá que fotografió todas las jeringuillas de heparina que se había pinchado durante el embarazo, como homenaje y recuerdo del pequeño milagro que había logrado que esta vez todo SÍ saliera bien.
Un abrazo y mis mejores deseos.
Muchísimo ánimo.Ya te queda menos para esa meta.Nuestras pulguitas son mas fuertes de lo que nos pensamos.Ánimo,ánimo y ánimo
Tu día a día se merece una recompensa maravillosa, me encantaría estar cerquita y darte un buen achuchón para animarte y decirte que todo va a ir bien. Cada pinchazo no es uno más sino uno menos, y cuando menos te des cuenta tendrás a tu cosita en brazos y nos los estarás contando. Un besote, guapa.
Me alegra que hayas hecho esa reflexión final que te hace optimista. Imagino tu miedo porque, a pesar de tener embarazos sin riesgo, no podía dejar de pensar en los peligros que acechaban a mis embarazos. Para mi era imposible no pensar en ello. Tenía días muy buenos y otros en el que las dudas me comían. En cada consulta salía emocionada y feliz con las buenas noticias y al día siguiente ya me parecía que algo iba mal. Mucho ánimo. Eres una luchadora.
Que no te quepa ni la menor duda, tu bebé será tu mejor recompensa y eso ya lo sabes, llevas 4 años experimentándolo. Por otra parte no sabía que ya habías pasado por 3 abortos. Yo llevo una mochila algo más ligera, pero cargada de los mismos miedos y sensaciones (1 aborto y un bioquiímico), miles de pruebas, una posible operación del septo completo, luego el hospital se echa atrás y me dejan tirada, más pruebas, más medicos…. Mis primeras semanas fueron como las tuyas, con miedo a ilusionarme por el ‘y si….. y si lo pierdo otra vez?’. Te entiendo perfectamente, tenía (e inconscientemente aún tengo a veces) miedo a ilusionarme demasiado por el qué pasará. Al final estoy aprendiendo a disfrutar de cada momento, saborearlo y sonreir. Nadie nos dijo fácil, yo no sé si llegaré a octubre o el peque aguantará hasta diciembre o enero, pero le debo toda mi felicidad y por él debo cambiar el chip.
Un abrazote compi de barriga
Claro que sí, una semana más que añadir a la esperanza de vida. menuda losa tan importante tienes, yo te deseo todo lo mejor, y que estés tranquila, la pulguita tiene la fuerza suficiente para salir adelante. Con todo el amor y cariño que le estás dando, y tu hijo también!
Lo de las contracciones me tendrían en un sinvivir, te han recomendado reposo?
Gracias Marta! Poco a poco y conforme voy cumpliendo semanas lo voy viendo de otro color. Me han recomendado reposo relativo y en esas estamos. Tengo días malos pero en general han mejorado bastante las contracciones.