Siete hábitos saludables para prevenir el contagio de virus en niño

virus catarrales

¡¡¿A quién no le gustaría prevenir el contagio de virus en niños?! Con la llegada del invierno y sus bajas temperaturas, los virus catarrales comienzan a campar a sus anchas y los niños en edad escolar son especialmente vulnerables a ellos. Los rinovirus son los principales causantes de los catarros y son uno de los virus más activos y resistentes que hay, ya que pueden mantenerse vivos hasta 24 horas en cualquier pañuelo, superficie u objeto infectado.

Tos, lagrimeo, estornudos, congestión nasal e inapetencia, son los principales síntomas de los resfriados comunes que afectan a niños y mayores en esta época del año.

Desde que Pulguita comenzó la guardería ya son varios los catarros que ha cogido y he de confesar que aunque los síntomas son banales y se trata de una enfermedad muy habitual, es un verdadero fastidio, tanto para ella como para el resto de la familia. Y es que durante tres o cuatro días, la peque está bastante intranquila, duerme mal, apenas come y la congestión le molesta mucho.

Hábitos saludables para prevenir el contagio de virus en niños

Cuando un niño o adulto contrae una infección vírica común, como puede ser un resfriado, una gastroenteritis o una gripe, nada podemos hacer salvo aliviar los síntomas con paracetamol o ibuprofeno, si el pediatra así lo considera. Los virus no se curan con antibióticos, ya que estos fármacos solo sirven para tratar las bacterias, por lo que simplemente toca esperar a que el sistema inmune haga su trabajo.

Pero aunque la prevención al 100% es imposible, existen una serie de hábitos saludables que pueden ayudarnos a prevenir el contagio de virus en niños:

Lavado de manos

En primer lugar, se hace imprescindible cuidar la higiene de las manos, sobre todo si en casa hay un miembro de la familia acatarrado. Como he comentado, los virus catarrales son muy resistentes por lo que si la persona afectada toca, por ejemplo, el picaporte de una puerta y a continuación lo hace nuestro niño, es probable que el virus se haya quedado en su manita y esto propicie su contagio.

Pañuelos de usar y tirar

Cuando limpiemos la naricita a nuestro peque es importantísimo que desechemos de inmediato ese pañuelo de papel. ¡Cuántas veces les habremos limpiado y habremos vuelto a guardar el pañuelo en el bolsillo para otro uso! Este gesto es un importante foco de contagio.

Cambiar la ropa cuando lleguemos a casa

Al llegar a casa del cole o la guardería, debemos cambiar de ropa a los niños, aunque nos parezca que el uniforme o la ropita que llevan puesta está limpia. Esta medida me la dio un pediatra para tratar de evitar la propagación en casa de los virus que pudieran traer Pulguita y mi Mayor del cole  y lo cierto es que, casualidad o no, mi bebé ha enfermado bastante menos que sus hermanos en este invierno.

Gel limpiador de manos cuando salimos de casa

Cuando salimos con nuestros niños de casa, son innumerables las superficies que pueden llegar a tocar susceptibles de estar contaminadas: puertas, los carros de los supermercados, butacas del cine, barras de los transportes públicos, parques de bolas… Como en estos casos se hace casi imposible lavar a nuestros peques las manitas con agua y jabón, mi consejo es que llevéis siempre en el bolso un frasco de gel limpiador con alcohol que venden en farmacias y les echéis un poquito, sobre todo antes de comer -si no tenemos acceso a un lavabo- o si tienen tendencia a meterse las manos o dedos en la boca.

¡Ojo con los besos! y nada de compartir los cubiertos

Aunque a veces lo hacemos casi sin darnos cuenta, debemos evitar dar besos en los labios a nuestros hijos, ni tampoco en sus manitas cuando son bebés, pues tienden a chupárselas con frecuencia. Y es que si nosotros estamos incubando un virus, o estamos contagiados pero no tenemos síntomas, este gesto propiciará el contagio. Lo mismo ocurre si compartimos con ellos una cuchara o bebemos del mismo vaso, por ejemplo.

Alimentación equilibrada y rica en vitamina C

Una alimentación variada y equilibrada ayuda al sistema inmune a ‘mantenerse en forma’, y aunque no va a prevenir los contagios por virus, sí que favorecerá la recuperación. En este sentido, los alimentos ricos en vitamina C son grandes aliados.

Vacunas al día

Pero sin duda, la medida más importante de todas es la vacunación. Ante un catarro común no existen vacunas, pero sí ante enfermedades más graves como el sarampión, la varicela, la tos ferina, la gripe o la neumonía bacteriana (vacuna del neumococo). Recientemente se ha empezado a utilizar una nueva vacuna en bebés para prevenir el contagio del VRS, el virus causante de la bronquiolitis.

En definitiva, aunque no siempre es posible prevenir el contagio de virus en niños, estas medidas pueden ayudarnos a pasar un invierno más tranquilo.

Deja un comentario

Responsable » Silvia Díaz.
Finalidad » Gestionar los comentarios.
Legitimación » Tu consentimiento.
Destinatarios » Los datos que me facilitas estarán ubicados en los servidores de SiteGround Spain S.L (proveedor de hosting de Ser tri-madre: ¡toda una aventura!) dentro de la UE. Ver política de privacidad de SiteGround Spain S.L (https://www.Siteground.es).
Derechos » Podrás ejercer tus derechos, entre otros, a acceder, rectificar, limitar y suprimir tus datos.