Hace unos días leía un artículo en el portal de Bebés y Más sobre la desagradable sorpresa que encontró una madre al cortar por la mitad a la conocida jirafa Sophie y encontrar moho en su interior, algo muy común también en los juguetes de baño.
En casa tenemos este mordedor. Se lo compré a mi bebé porque siempre había oído maravillas de él y lo cierto es que me parece un juguete buenísimo y mi peque lo ha usado mucho. El tacto de la jirafa es blandito y tiene un olor y una apariencia muy agradable. Además, la anatomía del juguete permite al bebé sujetar el mordedor con firmeza por las patas o el cuello y mordisquearlo sin riesgo a que se le escape de las manos. Como digo, un juguete 10 que sin duda recomiendo a todas las madres para aliviar las molestias de la dentición de sus bebés.
Pero, por desgracia, las asquerosas imágenes del artículo no me han pillado de sorpresa. No porque haya encontrado semejante cantidad de porquería en nuestra jirafa (no la he destripado para ver su interior, así que no sé en qué estado estará) sino porque algo muy similar encontré en los juguetes del baño.
Una de las cosas que más gusta a los niños es jugar en la bañera. Nuestra bañera se queda pequeña entre tanto juguete y cada día mis hijos eligen nuevos compañeros de baño.
El problema era que esos mismos juguetes con los que querían bañarse, los usaban luego para jugar en casa, en el parque o incluso para meterlos en la cama. Así que decidí separar parcelas y que en el baño se usaran solo juguetes aptos para ello.
Me fui a una juguetería y compré un montón de muñecos de goma aptos para el baño. Tenían muchas formas y colores, tacto blandito y algunos constaban de varios orificios para dejar escapar el agua a modo de chorro a presión, algo que a mi bebé le divertía mucho.
Juguetes para el baño con moho en su interior
Pero al poco tiempo de tener estos juguetes, comencé a percibir cosas negras en el agua de la bañera. Al principio no le di importancia, porque pensaba que se trataban de pelusas de los calcetines o de la ropa que a veces se queda pegada a la piel. Pero como aquellas cosas iban cada día a más, comencé a pensar que no se trataba de lo que yo creía.
Cambié la alfombrilla antideslizante de la bañera, limpiaba a conciencia la bañera antes de llenarla, revisaba los botes de gel pensando que el problema podía venir de ahí… El caso es que hubo un día en que llegué a vaciar y llenar la bañera de nuevo hasta en tres ocasiones, pero aquellas cosas negras flotantes volvían a aparecer.
Hasta que un día me di cuenta de que aparecían cuando metíamos los juguetes en el agua. Intrigada por el hallazgo, decidí cortar el juguete por la mitad y lo que encontré en el interior fue muy similar a las fotos que os comentaba antes de la jirafa.
Los juguetes para el baño tienen agujeros que permiten la entrada de agua. Si esta no se vacía después correctamente (y aun asegurándote de que dentro del juguete no queda ni una gota de agua, siempre va a quedar humedad), aparece una capa de moho negro en las paredes interiores del muñeco, que se va deshaciendo cuando se mete de nuevo en la bañera, soltando pequeñas escamas oscuras de aspecto y olor muy desagradable.
Hay quien sella con pegamento los orificios de los juguetes, pero a mí me dio tanto asco lo que vi, que los tiré todos a la basura. ¿Cómo es posible que esto ocurra en juguetes destinados a ser usados en el agua y que no haya ninguna advertencia al respecto?
Estos juguetes fueron comprados en una tienda de puericultura, duraron tan sólo 1 mes en casa, y fueron siempre empleados en un entorno limpio (una bañera llena de agua con jabón). Y aún así, lo que albergaban en su interior fue lo más repugnante que me he encontrado nunca.
Juguetes para el baño que recomiendo
Desde entonces, los juguetes que usan mis hijos en el baño no llevan ningún tipo de agujero o fisura por donde pueda filtrarse el agua. Damos mucho uso a los libros acuáticos, a los puzles de goma-espuma que se hacen sobre la pared de la bañera y a las pinturas de agua.
¡Os los recomiendo! Son juguetes divertidos, didácticos y ¡sobre todo, limpios!
Hola, es una pena lo que comentas ya que es verdad que cuando los juguetes de agua no son limpiados constantemente se les va formando una capa de hongo en las paredes de los mismos, sin embargo esto sucede con todos los juguetes, es por ello de la importancia que tu has comentado de quitar el agua de los mismos, el ponerlos a secar bajo el sol y lavarlos con coloro es una herramienta muy buena como preventivo.
Un gran saludo y felicitaciones por compartir tus experiencias como madre en esta gran aventura.
¡Muy buenas consideraciones para elegir juguetes de baño! Es imprescindible que los más peques asocien este momento a estímulos positivos, y los juguetes tienen un gran papel en dicho objetivo. Además, pueden servir para mejorar su aprendizaje y desarrollo. Nosotros recomendamos totalmente este tipo de artículos durante el aseo.