La toxoplasmosis en el embarazo, y el papel de los gatos en el contagio de esta enfermedad

toxoplasmosis en el embarazo

La toxoplasmosis es una infección ocasionada por un parásito denominado toxoplasma gondii que cursa de forma leve en personas sanas, pero que puede resultar realmente peligrosa si se contrae durante el embarazo, pudiendo infectar la placenta y repercutir en la salud y desarrollo del bebé.

Es frecuente escuchar ciertos comentarios alarmantes en torno a los gatos y las embarazadas. A menudo, incluso, se insta a las futuras mamás a separarse de sus animales o a evitar el contacto con ellos. ¿Por qué? ¿Qué es el toxoplasma y cómo puede afectar al bebé? ¿Qué relación tienen los gatos con este parásito?

¿Qué es la toxoplasmosis y cómo se contagia?

El toxoplasma es un parásito que se encuentra en la tierra y que infecta a las frutas y verduras que están en contacto con ella.

La forma más común de contagiarse es manipulando tierra contaminada (por ejemplo, haciendo labores de jardinería) y no lavándose las manos a conciencia después, sobre todo bajo las uñas.

Otra forma de contaminarse es ingiriendo frutas y verduras mal lavadas o poco cocinadas que hayan estado en contacto con este parásito., de ahí que se recomiende el uso de la Amukina o lejía para alimentos.

Otro problema es que este parásito puede contaminar los pastos de animales herbívoros que luego son sacrificados para consumo humano, como por ejemplo la ternera o el cerdo. Si estos animales son infectados y su carne no se cocina bien antes de ingerirla, también hay posibilidad de contagio. Ese es el motivo de que a las embarazadas se les prohíba comer carne poco hecha o curada, como por ejemplo los embutidos

Cuidados para tener un embarazo saludable

¿Y qué tienen que ver los gatos con la toxoplasmosis?

gatos y toxoplasmosis

Los gatos son los únicos animales, accesibles al ser humano, capaces de “hospedar” al toxoplasma y eliminarlo a través de las heces, siendo todavía posible su contagio.

Si un gato se alimenta de animales que a su vez hayan podido ingerir hierbas o tierra contaminada por el gusano (pájaros, roedores…) será contaminado y alojará en su interior al parásito entre 3 y 20 días. Pasado este tiempo lo elimina a través de las heces, aunque para que éstas sean infecciosas deben estar expuestas al aire libre entre 24 y 48 horas.

Por tanto, para infectarse de toxoplasmosis a través de un gato se deben dar todas estas situaciones, pero además, el dueño del animal deberá manipular las heces del gato sin ningún tipo de higiene.

Los gatos caseros no son cazadores y se alimentan de pienso, con lo cual es difícil que se contagien. Además, el arenero de los gatos debe limpiarse una o dos veces al día, por lo que se hace todavía más complicado que el toxoplasma de las heces pueda llegar a infectar, ya que hemos dicho que necesita una exposición al aire libre de entre 24-48 horas.

Es lógico que estando embarazada se extremen las medidas de seguridad con los gatos, sobre todo si estos son callejeros o desconocemos las condiciones de higiene y cuidado que tienen. Pero, en cualquier caso, por estar cerca de este animal o incluso acariciarles no se va a transmitir la enfermedad, y es importante desterrar este falso mito que tanto daño hace a estos animales.

Por tanto, para evitar la toxoplasmosis, recuerda: verduras y frutas bien lavadas o peladas, carne muy cocinada e higiene de manos, tanto si se tiene gato como si no.

8 comentarios en «La toxoplasmosis en el embarazo, y el papel de los gatos en el contagio de esta enfermedad»

  1. >Yo siempre que he oído eso de los gatos me preguntaba: si tan fácil es que te contagien, cómo es que durante años teniéndolos en casa no lo han hecho y lo van a hacer justo durante estos nueve meses, eh?

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  2. >Muchas veces la culpa la tienen los médicos que matan moscas a cañonazos y por eso la gente se forma unas ideas en la cabeza que no corresponden al 100% con la realidad.

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  3. >Cuanta ignorancia. Yo tengo tres gatas, me he críado con gatos tooooda mi vida, he alimentado a todos los gatos callejeros de mi barrio desde niña y,…., no he pasado la toxoplasmosis. Es una enfermedad que uno no coge así como así, no la coges por respirar el mismo aire que el pobre animalito. Has explicado muy bien su transmisión. Durante mi embarazo tuve que aguantar expresiones del tipo que comentas y que me ofendían muchísimo porque mis gatas son parte de mi familia.

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  4. >Hola Esther! Gracias por pasarte por mi blog y comentar esta entrada. Me ha parecido muy interesante la tabla que nos has dejado y te lo agradezco mucho. La verdad es que yo no sabía que la Amukina no prevenía contra la toxoplasmosis: mi gine me lo recomendó para lavar frutas y verduras y siempre he pensado que con eso era más que suficiente pero tras ver tu comentario leí varios artículos en Internet y es cierto lo que dices. Habrá que poner entonces más precaución la próxima vez.

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    • Gracias por compartir con nosotros tu artículo. ¡Seguro que es de gran ayuda! Estoy contigo en que falta muchísima información y es una pena tremenda porque hablamos de seres vivos que sufren y que son abandonados en condiciones espantosas por el miedo que genera la falta de información.

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  5. Si voy de vacaciones a casa de un familiar y este se tira 4 dias sin limpiar el arenero y lo tiene dentro de casa….
    Me afecta de alguna forma a mi sin ni siquiera tocarlo?
    De respirar ese mal olor durante un noche pasa algo?

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